Los “sindicalistas” del transporte

by Alberto Torres

La democracia tiene sus dolores de cabeza, aquellos que hacen cada vez mas estrechas la línea entre la libertad y el libertinaje, debido a que el sistema sociopolítico y aun con muchas debilidades en que vivimos es propenso a crear sus propios monstruos que pueden calificarse de oportunistas, demagogos, anarquistas e hipócritas que actúan violando las mas elementales reglas de la solidaridad y el bien común y pensando solo en sus intereses gremiales o sindicales.

Los sindicalistas del transporte en nuestro país son una especie de migraña que afecta a la sociedad y sobre todo al ciudadano común y corriente que se ve obligado a utilizar los servicios del transporte publico y que tiene que someterse a las huelgas de estos, a las incomodidades de los vehículos, a las imprudencias de los cheques y ahora también a un abusivo aumento del pasaje.

Abusivo, no sólo en el aspecto económico, pues se pretende incrementar en mas de un 100% el pasaje, lo que laceraría de manera significativa el bolsillo de los dominicanos que también son padres de familia y tienen compromisos monetarios que cumplir. Afecta en lo social, pues lo económico es lo que mas incide directamente en el comportamiento de las masas.

A todo esto ¿Quién defiende al pueblo? Debería ser el estado, específicamente el gobierno, pero se ha demostrado que a pesar de tener autoridad no la utiliza. No se trata de tomar medidas de fuerza compulsivas contra los sindicalistas del transporte, sino de defender a toda costa el bienestar de la sociedad, pues un gobierno que logra combinar la autoridad con la tolerancia no permita que dos o tres “señores” con caretas de personas justas mantengan en zozobra el país.

Vivimos una realidad en la que la prudencia aconseja que se actúe de acuerdo a las circunstancias, los sindicalistas del transporte no deben seguir aprovechándose del absolutismo idiota que provoca la falta de educación y cultura en los mas populares sectores sociales porque la inercia podría terminar.